Enfoque Complejo en la Gestión del Conocimiento en
Investigación
Autora: Ingrid Yorley Guerrero Rivera
Universidad Fermín Toro, UFT
Mérida, Venezuela
Resumen
El presente ensayo
precisa diversos planteamientos teóricos desde aportes de Morín, Osorio, otros;
los cuales permiten reflexionar sobre la efectividad de la gestión del
conocimiento en investigación dentro de la Universidad Politécnica Territorial
Manuela Sáenz (UPTMS), todo esto desde un enfoque complejo con sentido de
pertinencia a la realidad social actual, dado que el conocimiento es un recurso
muy apreciable para las instituciones de Educación Universitaria. Por cuanto,
en la Universidad Politécnica Territorial Manuela Sáenz
contar con talento humano altamente calificado es fundamental; pero el reto
indiscutible es innovar para aumentar y mejorar la capacidad gerencial en
investigación, con la finalidad de administrar correctamente el
conocimiento que es generado internamente en esta institución desde un enfoque
complejo.
Palabras clave: gestión del conocimiento; investigación;
organización.
Fecha de
Recepción: 28-05-2018 |
Fecha de
Aceptación: 06-08-2018 |
Complex Approach in Knowledge Management
in Research
Abstract
This essay requires various theoretical approaches
from the contributions of Morín, Osorio, others; which allow us to reflect on
the effectiveness of knowledge management in research within the Manuela Sáenz
Territorial Polytechnic University (UPTMS), all this from a complex approach
with a sense of relevance to the current social reality, given that knowledge
is a very important resource appreciable for the institutions of University
Education. Because, at the Universidad Politécnica Territorial Manuela Sáenz,
having highly qualified human talent is fundamental; but the indisputable
challenge is to innovate to increase and improve the managerial capacity in
research, in order to properly manage the knowledge that is generated
internally in this institution from a complex approach.
Keywords: knowledge management; research; organization.
Date
Received: 28-05-2018 |
Date
Acceptance: 06-08-2018 |
1. Planteamiento Introductorio
En los
últimos años, se ha asumido que la fuente de la ventaja competitiva se aloja en
la capacidad de las organizaciones para adquirir, transmitir, y aplicar
conocimiento. La praxis gerencial requiere de
grandes actualizaciones e innovaciones que según investigaciones de autores
declaran, que es un período de cambios y de la era planetaria, por lo que se
avecina una etapa con énfasis en el conocimiento y la creatividad para el
progreso y desarrollo de toda la institución. Barroso (2011):
puntualiza: “…en la actualidad el conocimiento se
ha situado como el primordial capital que poseen las personas, las
instituciones, organizaciones y naciones para manejarse en el nuevo orden
mundial” (pág. 3).
Según esta postura, se considera que el conocimiento
es imprescindible para mejorar continuamente los procesos organizacionales, por
tanto, se emplea para producir innovación, la generación del conocimiento
pretende ampliar y profundizar el rendimiento de lo que ya se conoce, puesto
que el conocimiento sea cual sea el área de donde provenga debe ser instrumento
para conseguir nuevas e innovadoras ideas en beneficio toda organización, en
términos de epistemología, se diría que es preciso determinar las
intersubjetividades en donde la
productividad del conocimiento va a ser cada día más, el factor crucial
en la posición competitiva de toda Institución.
A tal efecto, el conocimiento es hoy el insumo
primordial que inspira a las instituciones universitarias a mantenerse en
constante innovación, alimentando así, su crecimiento y desarrollo académico.
Este insumo se encuentra en cada uno de los miembros de la institución, y en la
medida que las universidades sean capaces de direccionarlo correctamente,
lograrán contar y disponer de la fundamental e importante ventaja competitiva
de la nueva era planetaria, destacándose así como universidades de renombre
académico y organizaciones inteligentes.
Para León, Tejada y Yataco (2003): La organización
inteligente es aquella que trata constantemente de asegurar que los miembros quienes
conforman la organización aprendan y exploten todo su potencial y capacidades y
habilidades; “esto es la capacidad de comprender la complejidad de adquirir
compromisos, de asumir su responsabilidad, de buscar el continuo
auto-crecimiento, de crear sinergias a través del trabajo en equipo,
sostenibilidad productiva académica y de transferencia de conocimientos” (pág.
82).
Por otra parte, los cimientos de la sociedad del
conocimiento en las universidades, se rigen por la innovación y capacidad
intelectual de sus miembros, las tecnologías de información y comunicación
(TIC), así como por la motivación que tienen para relacionarse social,
económica y culturalmente en el seno de la comunidad universitaria.
Por ende, es oportuno destacar lo relevante que es la
gestión del conocimiento en investigación dentro de la Universidad Politécnica
Territorial Manuela Sáenz. Dado que, como cualquier universidad no se escapa de
la realidad actual en la que se encuentran todas, como son los invariables
cambios tecnológicos que influyen en ellas; ocasionando efectos no deseados.
Pero esto no siempre deja de ser alentador, ya que se busca constantemente, que
sean organizaciones inteligentes, con conocimientos nuevos e innovadores, a fin
de dar respuesta al compromiso social que tienen dentro de un contexto
complejo.
Es por esto que, la gestión del conocimiento (GC)
dentro de las instituciones universitarias, permite aprovechar al máximo los
recursos existentes para que las personas desarrollen su potencial intelectual
sobre un tema específico.
La gestión del
conocimiento desde el contexto ontológico, en investigación, visto desde la
complejidad, involucra un conjunto de procesos gerenciales, con la finalidad de
generar nuevos conocimientos acercándose a una verdad que le dé sentido y
respuesta a la realidad que encierra el contexto universitario.
En consecuencia, el presente ensayo procura
dilucidar si efectivamente la gestión del conocimiento en investigación desde
el enfoque complejo, tiene capacidad explicativa sobre la eficacia
institucional. La gestión del
conocimiento en investigación en la Universidad Politécnica Territorial Manuela
Sáenz (UPTMS), constituye un tema fundamental, como sistema
organizacional. Así, partiendo de
diversos planteamientos teóricos a lo largo del presente análisis, se busca
avanzar hacia la efectividad en la gestión del conocimiento, lo cual facilite
la adquisición, asociación, e incorporación de nuevos saberes, así como formas
científico-tecnológicas en las funciones gerenciales dentro de esta institución
universitaria, con el objetivo de incrementar y mejorar sus niveles en las
investigaciones; de manera que sea una organización más productiva.
Destacando que, la Universidad Politécnica Territorial
Manuela Sáenz ha sido creada con el fin de municipalizar la educación y de
impulsar la evolución de la educación universitaria en Venezuela; esta
Institución como ente que agrupa una comunidad en general, posee la gran tarea
de orientar hacia la búsqueda de la verdad, afianzar los valores y principios
trascendentales del individuo, como derecho primordial apegado a la
Constitución de nuestro país.
Por
tanto, esta universidad emerge en el seno de la Misión Alma Mater, (Gaceta
Oficial Nº 5.987, 2010):
Con
carácter social humanístico, con la labor de ahondar, fortalecer y promover un
deseo añorado, nacido de las labores, aspiraciones y de la fuerza creativa de
los habitantes de García de Hevia y otros Municipios de la zona Norte del
estado, la cual, se consideró no solo como una necesidad, sino además
potencialidad, y fue conscientemente encaminado por medio de las jurisdicciones
regionales y la Fundación para el Desarrollo, Tecnológico, Educativo y
Científico (núm. 39468).
2.
Desarrollo
2.1. La Complejidad como Enfoque Integrador en la
Gestión del Conocimiento en Investigación
Hoy
las universidades sufren las consecuencias de los grandes desajustes y la
situación problemática que atraviesa el país, es incuestionable que los
problemas sociopolíticos, económicos y culturales están afectando las
Universidades Venezolanas, puesto que sería un error no asumirlo, ya que, la
universidad es parte de la sociedad y no escapa de todo esto. Del mismo modo
sucede con la investigación, la cual es parte esencial de esta; y por ende debe
existir un inseparable vínculo entre universidad-conocimiento-investigación y
sociedad, términos que lamentablemente se encuentran en una total
desarticulación y divorcio; es decir van por caminos bifurcados.
De
ahí, Ramos e Isa (2010), exponen: “ciertamente el contexto social, político
económico y cultural que rodea las universidades, hoy día ejerce una influencia
que no puede aislarse del conocimiento que dentro de ellas se produce, ni mucho
menos, verse como sistemas aislados independientes e inconexos” (párr. 8).
De
modo que, se debe encausar la universidad hacia la vigorosa tarea que siempre
ha tenido encomendada, como es la búsqueda del desarrollo y la calidad social;
pero, esto solo se puede lograr a través de la investigación universitaria; de
modo que, hay que reconstruir y reorganizar las estructuras gerenciales de
investigación dentro de la (UPTMS) buscando establecer políticas que no
permitan fragmentar el conocimiento, las investigaciones y faciliten la
constante revisión y mejora de anteriores investigaciones, utilizando el
producto intelectual final de un investigador como punto de partida de otro,
garantizando una dinámica de retroalimentación conveniente para avanzar de
forma sostenida en una realidad cambiante.
Es
decir, la complejidad como elemento integrador en la gestión del conocimiento
en investigación en la (UPTMS), debe analizarse como el desarrollo y aplicación
de un nuevo marco conceptual integrador, motivador y compartido por los
miembros involucrados desde diversas disciplinas. De ahí que Gil, Domínguez,
Garcia, Gándara y Mathison (2012), destacan que:
…la
investigación debe tener la agilidad suficiente, para poder migrar entre una
investigación básica de generación propia del saber y la otra investigación que
es inmediata, que busca cómo resolver problemas en todos los ámbitos de la
sociedad... para lograr tal propósito, la universidad tiene como reto el
empezar a innovarse al interior. Este llamado ha llevado muy especialmente a
las universidades a constituirse en organizaciones capaces de analizarse,
cuestionarse y transformarse a la luz de lograr una mejor comprensión y
transformación de los problemas educacionales en concordancia a los nuevos
retos de formación (pág. 43).
Esto
conlleva a que las universidades se adaptan a los cambios tecnológicos, entre
otros, para obtener su meta y cumplir con lo establecido en la Ley de
Universidades. Asimismo, García (2016), sostiene que:
…el
papel de la universidad debe ser visto dentro de un sistema de educación
superior, como el centro de una red que interconecta todo el conocimiento… una
sociedad basada en el conocimiento, el tratamiento, almacenamiento, intercambio
y producción de conocimiento prevalece, y la universidad, desde la perspectiva
de su principal misión en cuanto a la producción, trasmisión y transferencia de
conocimientos, puede y debe contribuir en la configuración de esa sociedad,
basada en el conocimiento, transformándose y evolucionando hacia un modelo de
docencia-investigación donde se gestione el conocimiento orientado a fortalecer
un sistema efectivo, sistemático y coherente de interacción entre la
universidad y su entorno (pág. 1).
Por su
parte, la gerencia universitaria a través de los tiempos debe evolucionar desde
diferentes disciplinas, teorías y paradigmas en concordancia con los cambios
paradigmáticos y la evolución tecnológica, por estar indubitablemente orientada
a su principal objetivo que es satisfacer las exigencias sociales; lo cual será
posible a través de sus procesos investigativos; a fin de conseguir una verdadera transformación y
reconstrucción universitaria.
Desde
esta perspectiva la complejidad invita a un pensamiento reestructurador
unificador capaz de unir y enlazar disciplinas a fin de generar conocimientos
útiles, valiosos para la organización y por ende para la sociedad, es decir,
conocimientos sin barreras ya que como mencionaba Morin cada disciplina
separada momentáneamente permite profundizar en un conocimiento específico,
pero luego al pasar el tiempo comienzan a mostrarse en un oscuralismo a lo que
llamo racionalidad restringida, lo cual nos aparta de la complejidad
organizada, y de una nueva visión de la realidad.
Dentro de este orden de ideas, gestionar el
conocimiento en investigación, en las instituciones universitarias, se muestra
cómo saber cuándo es considerado como un bien en sí mismo, esto conlleva que la
generación del conocimiento convertido en ciencia se vuelve útil cuando trae
consigo un beneficio a la sociedad, al mejoramiento y desarrollo de la misma,
esto como función creadora de nuevas e innovadoras ideas.
De
forma que se comprende que, dentro de los procesos investigativos los
representantes se deben a una comunidad académica, Marín (2010): señala “…debe
estar regida por un sistema cultural de la investigación, determinado por sus
tramas de significados, conocimientos específicos y práctica, desde la que se
tiene experiencia del mundo y se lo comprende, para ir tras él y transformarlo”
(pág. 5).
De
manera que, la gestión del conocimiento en investigación, implica una práctica
que posibilita a los integrantes la configuración de modernas y novedosas
formas de pensar, actuar y relacionarse con los que interactúan
(investigadores). Este sistema incluye estructuras conceptuales, métodos,
equipos de trabajo mecanismos de medición y grupos de personas que reconozcan
además el trabajo en colectivo.
Ahora bien, el proceso de gestión del conocimiento en
investigación en la Universidad Politécnica Territorial Manuela Sáenz, desde la
complejidad, no es perceptible, y es muy
difícil aceptar la realidad que enfrenta esta institución, ya que ciertamente
hay una serie de cargos destinados a la producción de conocimientos para su
puesta en práctica, pero la cuestión es que la universidad aún no ha asumido la
innegable necesidad de generar conocimientos y saberes integrados, para
mantenerse activa y así confrontar un
mundo que cambia de una forma precipitada; Así como, proporcionar soluciones
efectivas a los problemas diarios de la sociedad.
No obstante, la
poca generación del conocimiento dentro de la universidad no se corresponde al
propósito para la cual fueron creadas tales Instituciones.
En este contexto, en la mencionada universidad se generan
conocimientos fragmentados, cada investigador es individualista; es decir, se
producen conocimientos aislados, por cuanto debe alinearse este pensamiento
hacia la integración de saberes tal como lo plantea la complejidad, donde
emerjan nuevas ideas desde diversas disciplinas para generar de esta manera
investigaciones novedosas, con el propósito de reorientar la organización a su
crecimiento, desarrollo y al éxito.
Por lo
tanto, es vital que todo gerente sea transformador, participativo que comprenda
y se apropie de este pensamiento complejo, para superar las impredecibles
realidades complejas.
En
este sentido, estas organizaciones exigen líderes capaces de realizar
transformaciones en su entorno. Al respecto, Fernández y Quintero (2017),
aseveran que: “estos líderes transformacionales logran responder de manera
rápida a las exigencias del entorno apoyados en sus seguidores, en quienes han
influido, logrado el cambio de un interés individual a un interés colectivo,
alcanzando las metas de la organización” (pág. 60).
Se
confirma entonces que el tipo de liderazgo dentro de las instituciones es
determinante para romper paradigmas y generar cambios significativos. De tal
manera que en los equipos reales de investigación es fundamental el liderazgo
transformacional, el cual rompa con el individualismo, y fomente a la
exteriorización del conocimiento por parte de los investigadores científicos;
igualmente, motive al equipo a buscar metas comunes, este líder debe poseer una
actitud proactiva, positiva, holista orientada a la productividad y
consolidación de espacios apropiados para intercambiar conocimientos.
Adicionalmente,
el pensamiento complejo procura que broten nuevas formas de pensamiento,
estrategias y acciones en el ser humano que lo reoriente en su forma de ver,
entender el mundo y por ende enfrentarlo, parafraseando a Pereira
(2010):
La
función de un pensamiento complejo es develar la naturaleza y complejidad de
todos los fenómenos y sus interrelaciones, esta tarea, debe estar implícita
como compromiso para con nuestro mundo. Estamos inmersos en una época
planetaria; por lo tanto, se debe enlazar la enseñanza de la especie humana con
la ética del entendimiento entre los individuos. Las profundas reformas de
pensamiento deben indiscutiblemente estar puestas al servicio de la humanidad,
motivando a la comprensión, moral, solidaridad de los ciudadanos superando el
individualismo y la autodestrucción (pág. 74).
Ontológicamente, se asume que el universo, la
naturaleza es el resultado de las relaciones e interconexiones con los
estímulos naturales y colectivos. Esta configuración filosófica, permite
considerar que el saber humano no es adoptado de manera pasiva, de lo contrario
se procesa y crea activamente. Para la teoría constructivista la objetividad en
su totalidad aislada. bifurcada del individuo, no ostenta sentido alguno,
puesto que el conocimiento se traduce como una exégesis, una reconstrucción y
producción mental, resultando inconcebible apartar al investigador de lo que es
investigado.
Por tanto, para Pérez y Alfonso (2016):
“lo complejo es complexus porque se trata de acercamiento a múltiples planos,
niveles e implicaciones que van configurando en el pensamiento la proyección de
una explicación que se va articulando en los procesos de investigación” (pág.
15).
Según
lo expuesto con anterioridad, es importante, dentro de la (UPTMS) incluir y
promover el pensamiento complejo en la gestión del conocimiento en
investigación, puesto que constituyen una estrategia eficaz, transformadora
para su evolución, Balza (2009), señala que:
Se
propugna que no es posible pretender investigar para comprender e interpretar
realidades complejas con las viejas estructuras de un pensamiento simplificador
y desintegrador, con los agotados posicionamientos epistemológicos fragmentados
y parcelados de producir conocimientos, por lo tanto, es necesario asumir la
complejidad como un modo de pensar para poder sentir la vida a plenitud (pág.
47).
Es por esto, que el proceso de investigar desde la
complejidad debe coadyuvar en la solución de problemas de la sociedad llevando
un control, armonizando la libertad de crear, innovar enseñar y aprender; a fin
de evolucionar en el pensamiento, haciendo de este una herramienta capaz de
generar nuevos pensamientos que conlleven a una máxima satisfacción en la
calidad de vida de los ciudadanos.
En consecuencia, es un nuevo desafío a través de la investigación
la renovación y reestructuración del conocimiento sin ruptura disciplinar,
puesto que, parafraseando a Osorio (2012a):
resalta que nuestro mundo planetario se destaca por ser un mundo
complicado, es decir en red, lo describe como “en-redado” por un sin número de
interrelaciones, donde los fenómenos cuales sean, de índole natural o social dependen
entre sí, estos se analizan partiendo de su funcionamiento y ubicación con
relación al todo del que son parte. Las funciones aisladas
no existen, la posibilidad de llegar a un acuerdo fragmentado de nuestro
entorno es nula. Por ende, para entender este mundo complejo, es preciso una
nueva visión de la racionalidad humana; distinta a la que nos ofrecieron
concepciones lógicas clásicas (pág. 281).
Sin
embargo, esta vertiente de nueva racionalidad, debe llevar a una reforma y
reestructuración sin precedentes en las instituciones universitarias, que
coexisten actualmente con conocimientos generados en siglos pasados, cuando se
creaban desde la estructura disciplinar de los saberes, sapiencias necesarias
para otros tiempos, pero notablemente, desfasados con la realidad actual.
Por ende,
la importancia del pensamiento complejo el cual, Osorio (2012b): “nos invita y
reta para pensar religando, juntando, contextualizando; nos insta a ver e
integrar los antagonismos y a desarrollar una visión poliocular de la realidad”
(pág. 276).
De modo que, es tarea primordial de todos los
gerentes de las instituciones fomentar el desarrollo de actividades e
investigaciones presididas por un enfoque complejo, donde exista un
discernimiento creativo, innovador, que responda a las verdaderas necesidades
colectivas; que fortifiquen además las diversas practicas académico
administrativas dentro de la institución.
Por otra
parte, el sector universitario es el máximo delegado y/o
actor en lo que concierne a la generación de conocimientos, por ello el valor
que poseen las capacidades mentales calificadas dentro de las instituciones, se
ha vuelto un tema de gran transcendencia. Por lo que, al hacer referencia a la
generación del conocimiento, Berrio, Angulo y Gil (2013a), señalan: “que
generar conocimientos es la actividad sustantiva de los centros de
investigaciones científica; así también, complementariamente, apropiarse de él,
validarlo, documentarlo; divulgarlo y/o propiciar su transferencia para el
desarrollo de aplicaciones de beneficio social…” (pág. 123).
Es evidente, que las universidades y los Centros de
investigación científica como principales comisionados, deben poseer una
constante interrelación e integración en pro del beneficio social, con el fin
de exteriorizar, propagar los conocimientos y desarrollar investigaciones de
orden productivo para el país. Asimismo, Berrio, Angulo y Gil (2013b), acotan:
Es significativo, el interés de conocer como desde las
universidades y centros de investigación se genera valor al conocimiento, su
gestión es una forma de responder a problemáticas del entorno apoyado en la
contribución de personas e instituciones y la responsabilidad de los equipos de
trabajo. Estas consideraciones presuponen que no debe contemplarse la gestión del
conocimiento como un simple proceso más en la institución, sino que necesita
impulsar íntegramente las ventajas que proporciona la integración de la gestión
del conocimiento en la estrategia organizacional. (pág. 117).
Ante esta exegesis, es imprescindible que desde la
gerencia investigativa dentro de las instituciones de educación universitaria,
se fomente estudios que tengan
correspondencia con la amplia problemática que atraviesa el sector
universitario y el país en general, asimismo crear las condiciones y escenarios
para que se pueda desarrollar una cultura investigativa orientada a un
pensamiento holístico y transdisciplinario enrumbado a producir un verdadero
impacto en los contextos sociales y educativos. En esta misma línea, Berrio,
Angulo y Gil (2013c), expresan que:
Hoy día la sociedad actual viene estableciendo
consenso en torno al nuevo paradigma del conocimiento. Las universidades no
escapan ante esta realidad, su reto fundamental consiste en enfrentar cambios,
desarrollando nuevas herramientas de análisis, transformando mentalidades y
actitudes para que se adapten a las necesidades emergentes basadas en la
información y el conocimiento (pág. 123).
Es
axiomático que para que el docente pueda desempeñar su praxis educativa
eficazmente, es importante y una tarea casi imperiosa su inclusión en el medio
investigativo, puesto que, el mundo cambia de forma exponencial, por tanto el
docente debe evolucionar y actualizar su
cumulo de conocimientos para estar en consonancia con las exigencias de la actualidad,
aunado a esto, formar el individuo que tanto demanda la sociedad; igualmente
trascender en la generación de estudios y proyectos productivos que contribuyan
al progreso de la nación.
Partiendo
de esta premisa, Palma (2010), considera que:
la gerencia del proceso
investigativo en educación universitaria debe propiciar estrategias que generen
políticas científicas integradoras dentro del contexto universitario enfocadas
a enfrentar las demandas científico- técnicas de la sociedad y la economía en
un futuro a corto, mediano y largo plazo; destaca que mediante una adecuada
organización e integración de los grupos de investigación se puede motorizar y
optimizar el impacto de las investigaciones que se ejecutan (pág. 3).
Posteriormente, Figueredo (2017): destaca que no
existe saber único que proporcione todos los rasgos que despliega la gerencia y
que emplean los gerentes; argumenta además que “…la gerencia tanto en su
discurso teorizante como en su práctica cotidiana, es una especie de crisol donde
se forja un conocimiento puesto al servicio del colectivo y a la permanente
búsqueda del bienestar humano como propósitos cimeros” (pág. 330).
3.
Reflexiones
finales
Las
universidades deben apuntar hacia la generación de investigaciones
transcendentales, que consideren la axiología como premisa primordial, con una
visión holística del ser, donde se comprenda que el hombre no es un ser
aislado.
Al
mismo tiempo, iniciando con investigaciones capaces de generar soluciones en
problemas sociales básicos, aumentando gradualmente la complejidad de las
mismas, con un constante monitoreo de sus procesos aplicando reingeniería de
los mismos, para construir un sistema vivo en constante evolución, donde
existan políticas que permitan estandarizar procesos investigativos comunes,
que conlleven al máximo aprovechamiento del tiempo y los recursos dejando poco
espacio para la repetición de ideas y por el contrario se puedan nutrir o
actualizar investigaciones anteriores complementándose entre si; sin barreras
de campos u áreas del saber en un esquema de avance sostenido conveniente para
toda la comunidad universitaria.
Asimismo,
interpretando a Morin, incorporar una visión compleja, capaz de articular y
enlazar criterios que se rechazan entre sí, siendo desglosados en apartados
herméticos por falta de esta. Con esto no impulsa apartar lo simple, sino se
trata de observarlo y articularlo a otros.
Por
consiguiente, las universidades están llamadas a ser indiscutiblemente los
puntos de crecimiento, en un cuadro histórico en donde adquiere suma
importancia la capacidad para producir y aplicar nuevos conocimientos, los
cuales deben desencadenar una indudable calidad de vida para todos,
razonablemente esta generación de conocimientos y saberes se obtiene
principalmente a través de la investigación universitaria.
El reto de la Universidad Politécnica Territorial
Manuela Sáenz, radica en la forma como los gerentes deben enfocar sus prácticas
gerenciales a través de un liderazgo oportuno y efectivo, en este sentido
transformacional desde un enfoque complejo, que le permita como indica Morin
transformar el pensamiento de manera que se traduzca a uno con visión amplia
hacia nuevos horizontes; no uno que separe y mutile la realidad.
Para esto, la Institución de educación universitaria,
demanda gestión del conocimiento, planificación y desarrollo, además de
implementar y establecer un sistema que le permita aprovechar los conocimientos
explícitos (documentados), así; como los tácitos del (individuo) que están
alojados dentro de los miembros que conforman la universidad; de manera que
estos conocimientos sean trasmitidos, argumentados y retroalimentados entre todos los
investigadores desde diversas área del saber, para así facilitar la creatividad,
donde surja la innovación continua logrando que se gestione efectivamente el
conocimiento en investigación dentro de esta universidad desde la visión
compleja.
4.
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Ingrid Yorley Guerrero Rivera
e-mail: teacher272777@gmail.com
Nacida en Venezuela. Licenciada en Educación Mención Inglés,
otorgado por la Universidad de los Andes, Táchira (ULA), MSc. en Gerencia Educativa,
otorgado por la Universidad Experimental del Táchira (UNET), con mención
publicación y honorifica. Actualmente, Docente Universitaria, agregada a
Dedicación Exclusiva de la Universidad Politécnica Territorial del Norte del
Táchira “Manuela Sáenz”. Tutora de diversos Proyectos Socio Tecnológicos en la
Institución en la que laboro en los distintos PNF. Línea de investigación: La
Gerencia en la Sociedad de la Información.
El
contenido de este manuscrito se difunde bajo una Licencia de Creative
Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional
- Versión Original -
DOI:
https://doi.org/10.29394/Scientific.issn.2542-2987.2018.3.10.13.248-266